La falta de consensos entre las bancadas provocó ayer 19 de mayo del 2021 que por segunda ocasión se suspendiera la conformación de las comisiones. Los plazos específicos para el trámite de algunos proyectos de ley ponen a la Asamblea con el tiempo en contra.
A la Comisión de Salud le corresponde tramitar, por ejemplo, un proyecto de Ley para la gestión de la emergencia sanitaria por la pandemia, que fue requerida por la Corte Constitucional en septiembre del año pasado, y que fue presentada por el Ejecutivo el 22 de abril. Servirá para responder a los problemas de movilidad y atención en pandemia.
Mientras que la Comisión de Fiscalización tiene pendientes los pedidos de juicio político contra el ministro de Energía, René Ortiz; el contralor, Pablo Celi, y el exministro de Finanzas, Richard Martínez, que fueron calificados por la anterior Legislatura.
A esas tareas se sumará la reforma tributaria que, según anticipó el presidente electo, Guillermo Lasso, será presentada tan pronto asuma el poder el próximo lunes 24.
Eso, sin contar las observaciones que formule el Ejecutivo a los ocho proyectos de ley que aprobó la Asamblea pasada, dos semanas antes de terminar el mandato.
El secretario de Gabinete, Jorge Wated, dijo que los textos están en análisis de la Secretaría Jurídica, pero que las reformas a la Ley de Tránsito o uno que afecta a los municipios quedarán para revisión del presidente electo, Lasso.
“La posición (del presidente Moreno) ha sido que las leyes que tengan un impacto , y que puedan afectar a la gestión del siguiente Gobierno, las tomen ellos”, manifestó. Los plazos para que el Ejecutivo formule sus observaciones vencen a mediados de este mes y desde entonces la Asamblea tendrá 30 días para una resolución.
Ayer 19 de mayo del 2021, una hora antes de que debía instalarse el Pleno para conformar las comisiones, la presidenta, Guadalupe Llori (PK), notificó a los asambleístas que la reunión -que se suspendió el martes- se retomará este jueves, a las 10:00.
La decisión generó malestar en las bancadas y el Partido Social Cristiano (PSC) anunció que prepara un “plan B” para destrabar este asunto.
“Nosotros estamos proponiendo un acuerdo según el perfil de cada uno de los integrantes y sus aspiraciones. Confiamos en que podríamos llegar a tener los votos por el malestar que ha generado”, sostuvo la coordinadora del bloque, Dallyana Passailaigue.
Para este objetivo, los socialcristianos planean aglutinar a los 49 asambleístas del correísmo, además de algunos independientes hasta sumar los 70 votos que se requieren.
Pierina Correa, de Unes, calculó que si se unen estas bancadas solo les faltarían cuatro votos. Confía en incluir a asambleístas independientes que junto a Creo son parte de la denominada Bancada de Acuerdo Nacional (BAN).
Sin embargo, Jorge Pinto, asambleísta de Creo, aseguró que las conversaciones están avanzando y apeló a la paciencia de los ciudadanos. “Hay noches en las que no hemos dormido, nos hemos quedado hasta las 12 o una de la mañana llegando a estos acuerdos”.
Aunque ninguno de los bandos revela sus propuestas, los asambleístas reconocieron que las disputas se centran en al menos dos de las 15 comisiones: la de Fiscalización y la de Régimen Económico.
La directora del Instituto de Estudios Legislativos, Libia Rivas, explica que el funcionamiento de las comisiones parlamentarias es importante “porque en ellas se aprueban los informes de primer y segundo debate de las leyes”.
“Las comisiones son el espacio en que con mayor profundidad se debate, porque al Pleno llegan los textos propuestos por las mismas”, recordó.
Ayer, para la Asamblea terminó la jornada después de que el Pleno posesionó a los cinco parlamentarios andinos. Se trata de los correístas Verónica Arias y Virgilio Hernández; Cristina Reyes, del PSC; Miriam Cisneros, de Pachakutik, y Paúl Desamblac, de la Izquierda Democrática (ID).
Algunos de sus familiares fueron acomodados en las barras altas. Hernández llegó con un grillete electrónico en su tobillo izquierdo debido a las medidas cautelares por el proceso judicial que enfrenta por supuesta rebelión.
